
(OLLER 01)
La cocina con isla central se concibe como el corazón del hogar, situada en el eje principal de la vivienda y abierta a un espacio de más de 30 m² conectado con pasillo, recibidor y salón-comedor. La gran isla, pensada para dar servicio a ambos lados, se complementa con una mesa baja anexa que multiplica la funcionalidad y permite un uso versátil en el día a día. Esta disposición potencia la amplitud visual, fomenta la interacción familiar y convierte la cocina en un entorno dinámico y social.
En cuanto a los acabados, los frentes lacados en gris Vulcano se combinan con módulos altos en madera, aportando sobriedad y elegancia. El revestimiento del salpicadero en cristal magnético Magnetolab refuerza la estética vanguardista y tecnológica, a la vez que introduce un aspecto práctico, la posibilidad de imantar accesorios y elementos decorativos directamente sobre la superficie. Este equilibrio entre diseño y funcionalidad define el carácter contemporáneo de la estancia, manteniendo un estilo sobrio y atemporal.
La integración de electrodomésticos es otro de los puntos fuertes del proyecto. La cocina dispone de doble columna frigorífica, congelador independiente y una vinoteca con accesorios para copas en los muebles auxiliares. Además, el mueble desayunador ofrece un cierre perfecto al conjunto, gracias a su equipamiento interior, la organización optimizada y los interiores retroiluminados que realzan la estética de lujo. Todo ello convierte este espacio en un referente de cocinas modernas y funcionales, donde innovación y elegancia conviven en armonía.


